viernes, 26 de mayo de 2023

''Te amo'' ®Victoria Martínez


Recuerdo el día que te conocí, tu mirada inocente me decía que eras la indicada. Ganarme tu confianza no fue difícil, te compré flores, decía te amo” vacíos y cumplidos que llenaban tu corazón, aunque tu nunca te percataste de toda esta farsa, claro, solo eras una ingenua que cree en todo lo que le digo.  

 

Cada día despertamos juntos, tu rizado y rubio cabello sobre mi cara, mi mano alrededor de tu cintura, gestos de cariño” que demostraba para poder tener control sobre ti, me encanta poder hacerte sentir insuficiente, para que así vengas corriendo a mis brazos, caminando en un círculo vicioso que jamás termina, pero no cambies. Así sigue, bonita. Has que tu vida gire en torno a mí.  

 

Otra vez tomé la misma rutina de víctima cuando tú llegaste llorando, exclamabas que debía de cambiar, dándote una respuesta clara de que lo haría, sin embargo, ambos sabíamos que mi conducta iba a ser la misma, aun así tu nunca te marchaste, buena niña, siempre supiste que me perteneces. Siempre creíste en mí y sinceramente te lo agradezco, pude demostrar que manipularte fue muy fácil.  

 

Algunas veces me preguntaste que si había buscado ayuda, claro que he ido al psicólogo, múltiples veces, solo para darme cuenta que esos incompetentes no podrán jamás comprender el sentimiento que surge cada vez que te veo mostrar lo capaz que eres de abandonar todo lo que alguna vez has tenido, alimentando el amor propio que siento a través de ti.  

 

Aunque todo cambio la tarde que regresaste de la escuela, me explicabas que comenzaste a ver a una psicóloga, no me preocupé, tú eras demasiado tonta para darte cuenta de la realidad en la que estabas, el amor que sentía por ti era suficiente para no ver que detrás de él solo había engaños y desilusiones. Después de todo, ya no tienes voz propia, lo que a mí me gusta a ti te encanta, jamás sospecharías de mí.  

 

A pesar de lo que yo creía, todo cambio. No podía soportar que tu veneración ya no era toda para mi, la doctora quería que abrieras los ojos, aquellos que tanto me esforcé por mantenerlos cerrados, volviendo cada día una pelea recurrente por pequeños problemas que terminaban lastimándote únicamente a ti, ¿no lo entiendes?, yo solo quiero ver el fracaso en tu cara, ese que me mantiene a tu lado. Llenando tus expectativas para mantenerte conmigo, pues son cosas que tú nunca conseguirás. 

 

Esa noche fue mi perdición, había tomado mucho, tu irresponsabilidad sobre mi tuvo sus consecuencias, tuvimos nuestra pelea diaria, yo sabía que ya no eras feliz a mi lado, y yo ya no podía sentir el mismo respeto que antes me mostrabas. No pude percatarme de cuando llegamos a la cocina, nuestra pelea nos cautivó tanto que para cuando tomé noción del tiempo, todo era ya muy tarde, jamás pensé que yo era capaz de hacer tal atrocidad, dejé caer el objeto que ocasionó todo, ¿esto es mi culpa?, fue lo único que pude pensar, pues a mi mente solo venían recuerdos de cómo me descuidaste. 

 

Me apresuré al ver lo que había hecho, no puedo creer que después de todo, el miedo que sentías por mi, aquel que fue cegado por la forma en la que me amabas, dio frutos. Han pasado pocos días desde que me mostré con los ojos llorosos frente a la puerta de tus padre preguntando por ti, sabiendo muy bien donde estabas, todos confiaron en mi, de la forma en la que tú lo hacías. 

 

Engañar a tus papás fue fácil, más aún fue mostrar falsas grabaciones de las cámaras de seguridad que había por toda la casa a policías, ellos nunca sabrán que estas eran para saber donde estabas en cada momento del día. Tus amigas si que fueron problema, nada que yo no pueda resolver, terminaron cayendo en mis mentiras al verme llorar de forma tan desgarradora. 

 

Ahora viendo cómo tu cuerpo es cubierto por tierra, me recuerdo que siempre te amé, amé la forma en la que te controlaba, como hacías todo para complacerme cuando yo solo te hacía sentir insuficiente, logrando así mi cometido, y cumpliendo tu promesa, solo amarme a mí. Dejando a los árboles del bosque en el que te encuentras como único testigo de lo que sucedió, puedo decirte: Te amo. 

 

 ®Victoria Martínez

0 comentarios:

Publicar un comentario